Patricia Marín dirige un simposio sobre la escritura privada en la Alta Edad Moderna
Una beca Leonardo permite analizar más de 600 cartas de amor entre un cardenal del siglo XVI y sus amantes
“Las cartas amorosas fuera del matrimonio no eran un fenómeno raro, pero como -por su naturaleza- estaban destinadas a la destrucción son muy difíciles de estudiar. El epistolario del cardenal Ascanio Colonna es, por eso, tan interesante”, explica Patricia Marín, quien gracias a una Beca Leonardo estudia un corpus de más de 600 cartas amorosas que el religioso intercambió con diversas mujeres. El proyecto es el eje de un seminario que el 18 y 19 de noviembre reúne a investigadores de un género que arroja luz sobre la vida cotidiana de la Alta Edad Moderna.
17 noviembre, 2021
Buscando información sobre las relaciones de Miguel de Cervantes con políticos e intelectuales de su tiempo, Patricia Marín, profesora ayudante doctora de Literatura Española en la Universidad de Valladolid, encontró en el archivo del cardenal Ascanio Colonna, en el monasterio benedictino italiano de San Escolástica, un conjunto de medio millar de cartas de amor que le escribieron, bajo seudónimo, al menos cinco mujeres distintas. Gracias a una Beca Leonardo está estudiando, transcribiendo y editando un material del que “en España se conservaban solo algunos ejemplos sueltos -por ejemplo, en los archivos de procesos judiciales-, pero no un corpus tan extenso que realmente permite asomarse tanto a la intimidad femenina de la época como muchos detalles de la vida cotidiana”, explica Marín.
En el curso de su investigación ha podido constatar que lo que inicialmente parecía medio millar de cartas son en realidad unas seiscientas y las cinco mujeres detectadas en un primer momento han resultado ser nueve. Aunque todas firman con pseudónimo, Marín ha logrado averiguar la identidad de algunas de ellas, como Juana de Toledo y Colonna, nieta del virrey de Nápoles y prima carnal del cardenal.
El análisis revela que este tipo de relación epistolar “era una práctica social femenina que conocíamos por la condena moral o por su presencia en el teatro, pero de la que en España se carecía de fuentes no literarias. No todas las relaciones tienen la misma naturaleza: en unas se aprecia que ha habido un componente carnal que suscita el recuerdo apasionado o el deseo del reencuentro; y otras están más cerca de amores platónicos, retóricos y a distancia, que tienen mucho de juego de corte entre una dama casada y su amor imposible, pero contenían una dimensión romántica real”.
Por su extensión, el epistolario tiene, además, el valor de “plasmar con detalle la variedad de la expresión privada de la relación amorosa. Cuando Colonna tiene veinte años, estudia en España y tiene amantes -viudas, casadas, jóvenes doncellas-, las cartas son mucho más frescas; cuando se impone la distancia, las cartas se llenan de pesar por el tiempo sin verle. En ellas se imprime con viveza distintas maneras de mostrar el afecto: esas mujeres no querían escribir literatura ni nada parecido; son misivas en las que se juegan la honra si hubieran trascendido”.
Es, por otra parte, adelanta Marín respecto a la investigación en curso, “una expresión muy codificada y retórica: no tienen la frescura que pedimos hoy en día a una carta de amor. Su universo textual es, en este sentido, más limitado, pues se repiten conceptos o modos de expresar los sentimientos. En esto se alejan un poco de nuestra sensibilidad, donde parece que en cada mensaje queremos una línea nueva porque, si no, el amor es poco sincero”.
Además, en esta correspondencia asoman detalles de la vida cotidiana de la época, de manera que “hemos localizado a la primera lectora de Cervantes documentada; el primer testimonio de un lector de Cervantes, en este caso mujer, que alude a un pasaje de La Galatea, su primera novela”.
El estudio de la escritura personal como recurso privilegiado para la comunicación y la creación de memoria está adquiriendo un auge cada vez mayor. Por este motivo, y dentro del proyecto de la Beca Leonardo, Marín ha organizado un seminario para que “investigadores del área podamos discutir qué problemas encontramos y compartir soluciones”. Bajo el título “Del corazón a la mano: nuevas miradas al mundo de la carta y de lo escrito en la Alta Edad Moderna”, este taller de investigación se celebrará en el Palacio del Marqués de Salamanca, sede de la Fundación BBVA en Madrid, el 18 y 19 de noviembre. En las sesiones se abordarán cuestiones como “los distintos materiales (la carta, el diario personal…), los problemas de acceso a colecciones privadas, la digitalización de los documentos, los usos e intenciones comunicativas, los distintos modos de escritura femenina según se trate de relaciones familiares, sociales o amorosas… Y también cómo filólogos e historiadores podemos hacer confluir esa doble mirada que hasta ahora hemos mantenido”.