“En realidad, se ha convertido en una auténtica pasión, casi obsesiva, por lo atractivo que tiene  un asunto tan  intangible y bello. Cientos de variados modelos de bellísimos e intrigantes instrumentos de arco antiguos se muestran desafiantes en pinturas y documentos sin que se haya podido conservar ni uno solo, y menos la magia de su sonido”, explica Marín, “a pesar de ser un instrumento considerado de la más elevada categoría artística de su época, no ha sobrevivido nada escrito como testimonio de su práctica musical”.

El proyecto consiste en la recuperación del Arte de las vihuelas de arco; uno de los instrumentos musicales de uso más extendido en Europa durante los siglos XVI y XVII, al que se le atribuye origen español en el siglo XV, y predecesor de la mayoría de los instrumentos de arco europeos modernos. El trabajo incluye un estudio-reconstrucción organológica, recuperación del repertorio y sobre todo, como testimonio de su sonido auténtico, la grabación de varios trabajos discográficos.

Desde que recibió la beca Leonardo, el musicólogo ha dedicado estos años “a continuar construyendo modelos de instrumentos, según las técnicas originales, diseñando los planos geométricos, buscando materiales y maderas apropiadas, practicando su especifica técnica de ejecución polifónica y, finalmente, grabando CDs y videos con ellos para dejar constancia del resultado sonoro logrado a cada paso”.

La propuesta discográfica cuenta con más de 15 años de investigación en organología, elaboración de repertorio e interpretación histórica de la vihuela de arco y brinda un merecido homenaje a la memoria de tan digno instrumento musical elogiado en su época y casi olvidado hoy día. Gracias a la Beca Leonardo, en total ha reconstruido 3 instrumentos más, 6 arcos renacentistas y tiene en proyecto varios CDs y videos.

“A cada paso, con el esfuerzo, uno se promete a sí mismo que será el último pero, apenas está acabando ya está pensando en el siguiente modelo a estudiar. Evidentemente, para los artistas del Renacimiento no había límites en la creatividad ni en los proyectos a emprender y, la consecuencia de su constante búsqueda era que no repetían ningún modelo. Cuando uno entra en esta manera de pensar, cuando uno se deja llevar por la pasión que llenaba los espíritus de estos incansables hombres del Arte, uno acaba por entender al menos, que no hay meta, no hay objetivo, no hay límites, como en las notas de una pieza musical que uno empieza a escribir”, en palabras de Fernando Marín.

Se pretende recuperar un patrimonio histórico inmaterial: el sonido de estos instrumentos, su música, y en definitiva, su valor como vehículos de transmisión de cultura en el humanismo renacentista. Según Marín, “recuperando los instrumentos con los que originalmente se concibió y se interpretó la música del pasado, comprenderemos mejor su naturaleza, su esencia y la influencia que tuvo en músicas posteriores, como sin duda conoceremos mejor a los hombres del pasado, sus obras, su creatividad, sus inquietudes y sus emociones. Y, en consecuencia, conociéndolos mejor a ellos nos conocemos mejor a nosotros mismos”.

Fernando Marín es cellista, gambista y musicólogo nacido en Alicante (1974), especialista en instrumentos de arco antiguos del Renacimiento y del Barroco, interpretación histórica y música de cámara. Se doctoró en musicología con su tesis sobre la vihuela de arco hispana (su sonido y las cuerdas de tripa). Mediante su investigación sobre los orígenes, manera de interpretar y repertorio de estos instrumentos desarrolló una específica técnica de arco y de acompañar la voz, contribuyendo a la fabricación de cuerdas de tripa históricas. Estudió en Praga, Colonia y Bruselas. Junto con la soprano Nadine Balbeisi fundó el dúo Cantar alla viola, dedicado durante más de 12 años a la música medieval y renacentista. En solitario ha grabado hasta ahora un total de cinco CDs de los que Magia consoni et dissoni y The Art of the vihuela de Arco (publicados por Da-Vinci Classics en Osaka, Japón) son los más representativos.

En el horizonte cercano, Marín tiene pensado grabar un nuevo disco y seguir construyendo instrumentos cuyo sonido nos trasporte, entre otras, a la época renacentista. Desde 2003 es profesor de Viola da Gamba en el Conservatorio Profesional de Música de Zaragoza.