NOTICIA Exposición fotográfica realizada con una Beca Leonardo
‘Matria’, relato visual de la situación del campesinado en el mundo
La fotógrafa Judith Prat presenta su exposición ‘Matria’, proyecto fotoperiodístico que toma como referencia la Declaración Internacional de los Derechos de los Campesinos de Naciones Unidas, ofreciendo una visión global de la situación del campesinado en el mundo. El proyecto ha sido realizado con el apoyo de una Beca Leonardo a Investigadores y Creadores Culturales 2018 de la Fundación BBVA y al Departamento de Educación, Cultura y Deporte del Gobierno de Aragón para que se exponga por primera vez en el IAACC Pablo Serrano del 8 de julio al 30 de agosto.
8 julio, 2020
“’Matria’ es una llamada de alerta ante las agresiones que sufre la madre tierra por parte de los intereses trasnacionales de la agroindustria o la gran minería y es también un grito de socorro frente a las violaciones de los derechos humanos que sufre el colectivo campesino en el mundo. Además, es un homenaje a la mujer campesina, corazón y motor de la agricultura familiar que, a lo largo y ancho del planeta, garantiza la soberanía y la seguridad alimentarias”, explica Judith Prat, quien ha publicado en medios internacionales como The New York Times, The Guardian y DAYS Japan.
“A través de 66 imágenes realizadas en México, EE.UU., Mozambique, Sudán del Sur y Yemen he realizado un recorrido fotográfico que toma como referencia cuatro de los derechos más relevantes que encumbra la Declaración Internacional de los Derechos de los Campesinos y he documentado distintas situaciones en las que son violados”, contextualiza la autora.
El acaparamiento de tierras y el desplazamiento de campesinos, la situación de los trabajadores agrícolas transfronterizos, los efectos de la guerra en las zonas rurales y las alternativas propuestas desde la agroecología y el feminismo son los cuatro grandes bloques entorno a los que transita este proyecto.
Prat destaca algunos datos que le parecen relevantes, como que “hay aproximadamente 1.200 millones de campesinos en el planeta que, junto a sus familias, representan un tercio de la humanidad a la que alimentan. A pesar de su relevancia”, y según las fuentes que maneja la fotógrafa, “este colectivo soporta múltiples discriminaciones y violaciones de derechos humanos. El 80% de las personas que sufren el hambre y la pobreza en el mundo viven y trabajan en zonas rurales y la población agraria es la primera víctima de las violaciones de los derechos a la alimentación, al agua, al saneamiento y a una vivienda digna. En el epicentro de esta situación se encuentra la mujer, que sufre problemas añadidos, como la dificultad para el acceso a la tierra, cuestión determinante para propiciar una situación de discriminación estructural a nivel familiar, social y económico que genera violencias específicas. Tal es la trascendencia del problema de este colectivo y la invisibilización del mismo que en 2018 Naciones Unidas aprobó la Declaración Internacional sobre los derechos de los campesinos y otras personas que trabajan en zonas rurales”.
Motivación del proyecto y denuncia humanitaria
“En este contexto internacional consideraba necesario un análisis profundo sobre las violaciones de los derechos que sufre el colectivo campesino y las alternativas que se proponen para garantizar el acceso a la alimentación y la seguridad alimentaria de la población de todo el planeta”, explica la fotógrafa. Siendo ésta una de las motivaciones principales para realizar el proyecto ‘Sembrar derechos, cultivar dignidad. Relato visual de la Declaración Internacional de los Derechos de los Campesinos’, beneficiario de una Beca Leonardo en 2018 y dentro del cual se enmarca la exposición ‘Matria’.
“Este trabajo fotográfico aúna mí interés por documentar temas poco tratados, relacionados con derechos humanos y con un enfoque de género que está presente en todo el proyecto”, destaca Judith Prat.
La finalidad y objetivo principal del proyecto es la construcción, a través del articulado de la Declaración, de “un relato visual de la realidad” que el texto normativo pretende proteger, desarrollando cuatro de los derechos más relevantes que encumbra y documentando situaciones en las que estos son violados en cinco escenarios distintos del planeta: “En Mozambique –explica la fotógrafa-, el fenómeno de la usurpación y el acaparamiento de tierras por parte de las grandes empresas agroalimentarias y las mineras, consentido y favorecido por el gobierno, ha abocado a muchos campesinos al hambre y a la pobreza. El país se encuentra entre los 10 menos desarrollados del mundo. La mayoría de las concesiones en Mozambique se han hecho sobre tierras ya cultivadas por agricultores locales, a quienes se desplaza con engaños y presiones a zonas peores”.
El campo de Estados Unidos se nutre principalmente de jornaleros mexicanos que, junto con los agricultores para los que trabajan, son el motor del sector primario del país. Al menos la mitad de estos trabajadores agrícolas inmigrantes desempeña su labor sin permiso de trabajo.
Dos tercios de las personas que padecen hambre aguda en el mundo se encuentran en países carcomidos por conflictos armados. En el epicentro de esta violencia, el campesinado, que ve convertido su trabajo en objetivo, y su territorio, en campo de batalla. Yemen o Sudán del Sur son ejemplos claros de estas circunstancias. En ambos países las partes en conflicto han utilizado el hambre como arma de guerra.
Concluye la autora que “respecto a las propuestas para superar estos modelos de producción que aniquilan la agricultura familiar, muchas voces se han alzado en los últimos años para señalar que solo la agroecología en un marco de soberanía alimentaria puede configurar una alternativa firme que acabe con las crisis alimentaria; sin olvidar que la gran mayoría de las productoras locales en África son mujeres. Las mujeres en Mozambique no tienen los derechos sobre la tierra y muchas de ellas se están organizando en asociaciones vinculadas a la producción de alimentos ecológicos. Estar organizadas les permite defenderse del modelo y las prácticas sociales que pretenden alejarlas del control de su trabajo”.
El proyecto financiado por la Fundación BBVA incluye también la creación de un espacio web con una versión ampliada de la exposición que estará disponible en www.judithprat.com. A lo largo del mes de julio se publicará en prensa digital una serie de reportajes semanales que abarcan todo el proyecto fotográfico. Y están programadas dos visitas didácticas a la semana guiadas por la propia autora a la exposición, además de otras actividades divulgativas impartidas por el IAACC Pablo Serrano. (Toda la información en www.iaacc.es).